viernes, 6 de septiembre de 2013

¿Allegri-Italia, Prandelli-Milan?

Las nominaciones están en los hechos. Los juegos son a largo plazo, pero en casa Milan la cuestión del entrenador es ya de actualidad. Del resto Massimiliano Allegri lo ha tenido en cuenta, aceptando la perspectiva de volver a discutir la renovación sólo en primavera, es decir, en caso de clasificarse para Champions League. En caso de resultado negativo la perspectiva de quedarse ni siquiera se toma en consideración…
El a.d. rossonero Adriano Galliani acaba de cerrar el mercado con explícitas ambiciones y teniendo muy en cuenta la operación del técnico toscano. No es casualidad ya que fue su principal patrocinador en el pasado mes de mayo, cuando el propio Berlusconi puso en duda su confirmación. Así es aventurado decir que en Via Turati soplan aires en contra de Max. El club lo apoyó incluso en las recientes decisiones de mercado y se espera que el maduro grupo lo siga en los próximos meses.
Alrededor de él hay un clima positivo, pero la impresión es que esta sea la temporada de los balances tras la refundación empezada en 2012. El club espera importantes resultados para darle a Allegri nuevas señales de confianza. Y los últimos movimientos del entrenador van en esta dirección. La apertura a la Selección para ser el sustituto de Prandelli no sucede por casualidad. La tentación existe, las posibilidades también.
Algo se está empezando a mover. Incluso las consultas de Abete entrarán de manera viva sólo con la entrada del nuevo año. Algo genial para las exigencias de Allegri. Pero quien gobierna ese cruce es Cesare Prandelli, que abandona la Selección tras el Mundial. Pero el Seleccionador ayer comentó que no había tomado una decisión sobre su futuro. Pero el tam tam empieza a sonar. Y el Milan entra dentro de la batalla. Con una conclusión muy sencilla: Allegri a Italia, Prandelli al Milan. Un axioma a verificar con el tiempo, pero algo más que comprensible.
El técnico de Orzinuovi tiene la identidad adecuada para el nuevo curso rossonero. Su vocación para trabajar con los jóvenes es bien conocida. Sobre todo intriga su relación con Mario Balotelli. Una relación cementada con la camiseta azzurra y que permitió a SuperMario recuperar el camino maestro en el momento adecuado. Y, luego, sin dejar de lado las relaciones instauradas con el resto de azzurri (De Sciglio, Abate y El Shaarawy), aparte que no debe ser olvidado que en Florencia tuvo a Montolivo y Pazzini. Los pros abundan, eso está claro.
Pero hay otras dos candidaturas internas que no debe ser olvidadas. En verano, Silvio Berlusconi quiso ir a por Clarence Seedorf, pero demasiados problemas hicieron descartar esa solución. Pero nada excluye que ese nombre vuelva a aparecer. De manera paralela, Pippo Inzaghi prosigue su camino de crecimiento con el Milan Primavera. Ojo también sobre él.

No hay comentarios:

Publicar un comentario